El presidente de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) dijo ayer que no ha considerado en ningún momento que el accidente en que resultó seriamente herido el pasado domingo, mientras se trasladaba desde Santiago a la capital, haya sido un sabotaje o un atentado contra su vida.
El mayor general Rolando Rosado Mateo, quien resultó con varias fracturas en el accidente, afirmó que esa teoría ni siquiera ha sido planteada por los investigadores, porque se trató de un accidente lamentable en el que “gracias a Dios nadie perdió la vida”.
Rosado Mateo ofreció sus declaraciones por intermedio del vocero de la DNCD, coronel Alcides Rodríguez Veras, ante versiones de prensa que afirman que el vehículo en que viajaba el presidente del organismo antidrogas pudo haber sido saboteado, debido a la guerra que ha iniciado contra el narcotráfico y en la que han caído importantes oficiales y agentes policiales y militares.
FracturasEn el accidente, ocurrido entre Piedra Blanca y Villa Altagracia, el general Rosado Mateo se fracturó una costilla y el omóplato, pero hace tres días fue dado de alta y se recupera en su residencia.
Su vehículo se deslizó a alta velocidad de la autopista, resultando también herido su chofer y un guardaespaldas.
Rosado Mateo regresaba de Santiago, adonde acudió precisamente a revisar el expediente acusatorio contra el jefe de Narcóticos de la Policía en esa ciudad y otros ocho agentes, que fueron sorprendidos en una transacción de drogas con un grupo de civiles.
Durante la gestión de un año y dos meses de Rosado Mateo, la DNCD ha desmantelado más de 20 grupos de narcotraficantes, con conexiones internacionales, entre los que se destacan la red que dirigía el boricua José Figueroa Agosto.
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